lunes, 6 de junio de 2016

Tiene “una vida despichada” comentó ella…

Y ayer mientras manejaba empecé a observar cómo era que había arruinado mi vida sin darme cuenta… Había cometido muchos errores, me había equivocado montones de veces, me había caído muchas veces y levantado todas y este no era un momento en que yo podría describir como una vida despichada… Al contrario, me sentía en paz, estaba conectada con la gente que realmente me importaba en mi vida, mucha gente se había ido de mi vida y mucha gente había regresado. Nunca había tenido tanta coherencia: entre hacer, pensar y sentir!!!

Que será que lo ve así? Será porque después de tantos años soy de las madres que disfruta ir a dejar y traer a la escuela a mi hija aunque este sin bañar y en pijamas? O será porque solo trabajo tres veces al mes?, o será porque mis amigas me visitan y yo las puedo ir a visitar cuando quiera?, o porque salgo a tomarme una cerveza con alguien de vez en cuando?, o porque tengo dos o tres amigos con los que hablo todos los días y los siento mis hermanos del alma?, o será porque tengo muy claro mis sentimientos, que será? … será porque tengo que mantener a mi hija yo sola y sé lo que es hacer matemáticas mil veces para distribuir el dinero?, o porque con 37 años me devolví a vivir con mi mamá?

Entonces decidí ver su vida y me di cuenta de algo… no tenía dos cosas que ella tenía: un marido y estabilidad económica. Era por eso porque yo tenía mi vida despichada según sus palabras. Y algo mucho más importante, yo ya no tenía miedo...

Y entonces examiné lo poco que sé su vida… sabía que engañaba a su esposo con otro hombre, y no se daba cuenta que a quien engañaba era a ella misma. Y entonces para tapar todo y que el esposo jamás se diera cuenta, estaba mucho más cariñosa con él, y compraban cosas, y más cosas para tapar todo eso que ya solo ella podía ocultar. Porque ella se casó joven y pensó que todos seguíamos jóvenes pensando igual. Pero habíamos crecido y había cosas que no era necesario que las contaran, porque todos las veían.

Y entonces me di cuenta que teníamos un concepto diferente de la frase vida despichada. Porque yo no tenía que esconderme de nadie y podía expresar libre mis sentimientos, porque no tenía que tener sexo con un hombre que no quería, porque no tenía que engañar a nadie y mucho a menos a mí y porque a mucho golpe yo había aprendido el valor de una pareja…. Porque perdiendo a gente muy importante en mi vida me había dado cuenta el valor de la comunicación, el respeto y la lealtad. Porque la mentira era lo más triste que había experimentado, pero ahora cada noche me acostaba en paz!

Y me sentí afortunada y más agradecida que nunca de tener “una vida despichada", porque yo ya no tenía miedo a vivirla...

No hay comentarios.: